Ingredientes:
150 gr. de galletas tipo digestive o tipo campurrianas
70 gr. de mantequilla
500 gr. de queso mascarpone
150 gr. de azúcar
200 ml. de nata líquida para montar
50 gr. de maizena
3 huevos
mermelada de arándanos, de frutos del bosque, frambuesa o fresa según gusto
Elaboración:
Triturar las galletas hasta que queden bien finas, meter la mantequilla al microondas unos segundos y una vez fundida mezclar con las galletas molidas.
Extender sobre el fondo del molde y meter en el horno unos 10′ a 170º (previo precalentado)
Mezclar el resto de ingredientes (excepto la mermelada) y mezclar bien en un cuenco.
Yo primero bato los huevos, agrego el azúcar, nata, maizena y queso mascarpone (en este orden) pues me resulta más fácil así.
Si os quedan grumo o si lo deseáis podéis mezclar o terminar con la batidora.
Precalentar el horno a 180º
Volcar la masa o relleno en el molde sobre la base de galleta y meter en el horno, durante unos 35′ aprox. Podéis comprobar si está listo por el doradito y pinchándolo así sabeis si esta cuajado por dentro.
Ir comprobando, que cada horno es diferente, yo conozco quién lo termina en 20 o 25′ por su tipo de horno.
Sacar del horno, dejar enfriar, desmoldar y cubrir con la mermelada elegida.
también podéis cubrir con gelatina de fresa o frambuesa y unas fresas, queda muy bonito, aunque me gusta más con mermelada de arándanos.
Notas:
Es un postre muy rápido y resultón que os sacará de un apuro y os dejará estupendos en cualquier situación.