Ingredientes:
3 huevos M
1 yogur griego (sin azúcar) si no tenéis puede ser de limón o coco.
1 medida de aceite de girasol
1 medida de azúcar
3 medidas de harina
100gr de chocolate de repostería
2 cucharadas de cacao en polvo (no colacao)
1/2 sobre de levadura
1 sobre de gasificante
1 ralladura de una naranja.
Elaboración:
Primero de todo, trocear y fundir el chocolate y reservar para que se vaya enfriando, podéis hacerlo a golpes de microondas de 30 segundos con cuidado de que no se os queme, o podéis hacerlo al baño maría.
Precalentar el horno a 170/180º.
Por un lado en un bol mezclamos los ingredientes «húmedos» comenzando por los huevos y agregando también el azúcar. Añadir el yogurt y coger el vaso del yogurt vacío como medida del resto de ingredientes.
Por otro lado en un bol mezclamos los ingredientes secos (harina, levadura, gasificante y cacao en polvo) y tamizamos.
Cuando esté todo, juntamos ingredientes secos y húmedos mezclamos bien y añadimos el chocolate fundido al principio.
Podemos añadir un dedito de anís o unas gotas de aroma de naranja o de vainilla según el gusto de cada uno y según para que lo vayáis a utilizar.
Podéis prescindir de la levadura tranquilamente, yo lo olvidé por error en mi penúltimo bizcocho de chocolate es el de la foto) y subió estupendamente y quedó muy rico y esponjoso. El truco está en montar las claras y airear bien la masa.
Untar el molde del bizcocho con margarina y luego espolvorear de harina, sacudir levemente para quitar la harina sobrante.
Calentar el horno a 170º y cuando esté, hornear durante unos 40minutos, aunque ir controlando, porque dependiendo del horno si es eléctrico, con ventilador o sin él será diferente.